©Hola Doctor
Tratar la depresión durante el embarazo puede ser vital para la salud tanto de la madre como del bebé, pero una nueva investigación sugiere que, si durante este período se toman antidepresivos, las mujeres podrían volverse más vulnerables a desarrollar diabetes gestacional. Los autores encontraron asociaciones más significativas con los medicamentos venlafaxina (Effexor) y amitriptilina (Endep), sobre todo cuando se tomaron durante un largo período de tiempo.
También te puede interesar:
Depresión, el Enemigo Silencioso de la Salud Mental
A pesar de este vínculo, Anick Berard, presidenta de investigación en medicamentos, embarazo y lactancia en la Universidad de Montreal y directora de la nueva investigación, señaló “la depresión se debe tratar durante la gestación. Si una mujer está embarazada y toma antidepresivos, no debe abandonarlos por su cuenta, sino que debe hablar con el médico para evaluar la mejor forma de proceder”.
La diabetes es una enfermedad que surge cuando los niveles de azúcar en sangre son elevados. El páncreas, que ayuda en la digestión, produce diferentes hormonas, como la insulina, que contribuyen a la regulación de estos niveles. Cuando la insulina no es suficiente o no funciona adecuadamente, lo que ocurre en las diabetes tipo 1 y 2 respectivamente, la glucosa permanece en la sangre y puede causar graves problemas, como daños en la visión, los nervios, los riñones, el corazón o el cerebro.
Según la Clínica Mayo, otra variante de esta enfermedad es la gestacional, que se manifiesta durante el embarazo y al igual que los otros tipos afecta la forma en que las células utilizan la glucosa, generando altos picos que pueden afectar tanto a la mujer como al bebé.
Otro aspecto preocupante durante la gestación es la depresión, por ello, es que generalmente las embarazadas recurren al uso de antidepresivos. La venlafaxina pertenece a una clase de fármacos llamados inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS), y la amitriptilina es un tipo más antiguo de medicamento llamado antidepresivos tricíclicos.
Sobre estos, Berard señaló que son solo una opción y que existen muchos tipos de tratamientos. También alertó que su trabajo solo probó un vínculo entre estos fármacos y la diabetes gestacional, no una relación causal.
Pero, los investigadores creen que la conexión podría ser que los antidepresivos afectan al metabolismo del azúcar. Además, uno de sus efectos secundarios es el aumento de peso, que es un factor de riesgo de la diabetes. Sus hallazgos se publicaron en BMJ Open.
Conocer las opciones
En el estudio, Berard y su equipo recurrieron a datos de embarazos y nacimientos en Quebec entre 1998 y 2015. Observaron a casi 21 000 mujeres con diabetes gestacional, comparándolas con más de 209 000 que no sufrieron esta afección.
Poco más de un 4% de las que tenían diabetes gestacional tomaban un antidepresivo. Incluyeron a la fluoxetina (Prozac), fluvoxamina (Luvox), paroxetina (Paxil) y sertralina (Zoloft), que también son conocidos como ISRS, junto con Effexor o Endep.
Usar cualquiera de esos fármacos aumentó las posibilidades de diabetes gestacional en un 19%, en comparación con no tomarlos. Aunque, los medicamentos más significativos fueron Effexor, que aumentó el riesgo en un 27%, y Endep, que lo aumentó en un 52%.
Las probabilidades fueron mayores mientras más tiempo se tomaban los fármacos, o si se tomaba más de uno. Usar los medicamentos durante un periodo corto aumentó el riesgo en un 15%, mientras que tomarlos por un periodo largo lo aumentó en un 29%.
“La prevalencia de referencia de la diabetes gestacional es entre un 7 y un 9%, por lo tanto, un aumento del 15% resultaría en una prevalencia del 10%, mientras que un aumento del 52% resultaría en una prevalencia del 14%. Aunque los aumentos siguen siendo pequeños, son superiores a lo que hubiéramos previsto”, dijo Berard.
El doctor Rahul Gupta, director médico de March of Dimes, consideró que los médicos deben ser conscientes de que todos los antidepresivos no son iguales respecto a la probabilidad de diabetes gestacional.
Según el experto, que no participó del estudio, parece que los ISRS conllevan un riesgo más bajo que otros antidepresivos. Sin embargo, cree que la primera opción para combatir la depresión durante el embarazo no debe ser farmacéutica. En su lugar, incluye la consejería, el ejercicio y otras formas de afrontar la depresión sin medicamentos. Pero, también fue claro respecto a que las mujeres que necesiten esos fármacos deben tomarlos.
(iM-rcc)