En el cine, Will Smith ya había experimentado una historia similar al covid-19 cuando parecía haber sido el único sobreviviente de Nueva York en Soy leyenda. Y en una época donde el mundo del cine quedó completamente paralizado, menos de dos meses después del estreno de Bad Boys para siempre (con más de 200 millones de dólares en recaudaciones), él encontró la fórmula para seguir vigente.
En Facebook suele aparecer en el espacio Red Table Talk en el que su esposa Jada Pinkett Smith toca temas bastante íntimos con su hija Willow. Y, mientras, él prepara una serie de comedia This Joka para Quibi, Will ahora incluso tiene otro show propio WFH Will From Home en Snapchat. Solo faltaría que se anime a hacerlo en español porque es el primero en decir “Sé muchas palabras en español”, antes de volver al inglés para sentirse mucho más cómodo, en una época donde hoy recorre el mundo su famosa frase “Racism is not getting worse, it’s been filmed”, que se traduce como “El racismo no es peor, está siendo filmado”. Dice que, en su caso, la policía lo trata mejor por ser famoso y que esa fama la usó una vez cuando la policía lo detuvo. (iM-rrc)