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Sin duda el momento más importante alrededor del calendario del beisbol es la Serie Mundial. Cincuenta peloteros, divididos en los rosters de cada equipo, son los protagonistas del Clásico de Otoño, el compromiso que presenta lo mejor de lo mejor en ambas ligas; y así como Jaime García y Fernando Salas lo hicieron con los Cardinals de San Luis en 2011, dos mexicanos escenificarán la pelea por el Trofeo del Comisionado: Roberto Osuna y José Urquidy.
En aquella Serie Mundial de 2011, Jaime García tuvo dos apariciones como abridor. De hecho, en la primera de ellas se convirtió en el segundo pitcher nativo mexicano en abrir un juego de Clásico de Otoño desde 1981 cuando Fernando Valenzuela abrió fuego por los Dodgers de Los Ángeles en aquel memorable Juego 3 ante los Yankees de Nueva York.
Durante su primera apertura en el Juego 2, el tamaulipeco escenificó una gran salida de 7.0 entradas en blanco en las que sólo admitió tres hits y ponchó a siete. A pesar de un gran trabajo, los Cardinals perdieron ese juego por 2-1, luego de que los Rangers de Texas hicieron las dos carreras del gane en la novena entrada.
Con cuatro días de descanso, García tuvo una salida muy contrastante en su segunda aparición, pues sólo logró retirar 3.0 entradas luego de recibir dos carreras con cinco hits. Afortunadamente para él, la ofensiva pagó su fianza, y en un choque de toma y daca, los Cardinals ganaron el juego en extra innings por 10-9 para ponerse en la antesala del campeonato.
Por su parte, el sonorense Fernando Salas colaboró con cuatro salidas desde el bullpen en dicha Serie Mundial. Las primeras dos actuaciones, lanzando como relevo situacional no recibió daño alguno. En relevos más largos, las otras dos salidas completó 1.0 y 2.0 innings de los Juegos 3 y 6 donde recibió todo el daño, un total de cinco anotaciones.
Ahora es turno de Roberto Osuna y José Urquidy. Osuna, originario del Ejido Juan José Ríos, Sinaloa, llega a su segunda postemporada con los Astros de Houston, sin embargo, será su primera participación en Serie Mundial afianzado como el cerrador de todas las confianzas del bullpen naranja.
Por su parte, Urquidy está viviendo una campaña de ensueño, ya que, en su temporada debut, llega al Clásico de Otoño. En su primera aparición de por vida en postemporada dejó en blanco por 1.2 entradas a los Rays de Tampa Bay durante el Juego 4 de la Serie de Divisional, mientras en el Juego 6 de la Serie de Campeonato, juego que clasificó a los Astros a esta nueva Serie Mundial, recibió un relevo de pronóstico reservado, y aunque le conectaron un home run con el que los Yankees se pusieron a una carrera de empatar el score, el mazatleco se fajó para retirar 2.2 entradas, un importante relevo que, en palabras del manager A.J. Hinch
“Nosotros no ganamos si Urquidy no entra”.
(iM-rcc)
