“Ventajas de la Frontera Sur chiapaneca para el Nearshoring: Oportunidades que no puedes dejar pasar”
El mundo empresarial está cambiando, y con él las estrategias para optimizar operaciones y mantenerse competitivo. En este panorama surge el nearshoring, una tendencia que lleva a las empresas a acercar sus cadenas de suministro a mercados clave, reduciendo costos logísticos y asegurando una mayor eficiencia. México, por su ubicación estratégica y su red de tratados comerciales, está en el centro de esta revolución, y dentro de este país, la Frontera Sur se posiciona como un destino con un potencial inigualable.
La Frontera Sur, específicamente en el estado de Chiapas, ofrece una combinación única de infraestructura moderna, beneficios fiscales y ubicación estratégica. Puerto Chiapas es un claro ejemplo de ello. Más allá de ser un punto clave para el comercio internacional, cuenta con un parque industrial, un agroparque y un recinto fiscalizado estratégico que facilitan la logística y el procesamiento de mercancías. Además, los dos polos de desarrollo de la región están diseñados para atraer inversiones y convertirse en referentes de la industria y la agroindustria. Este puerto, gracias a su capacidad y ubicación, se posiciona como una alternativa natural a Salina Cruz en México y Puerto Quetzal en Guatemala, conectando mercados de manera eficiente.
A esto se suma la línea K del Ferrocarril, que conecta Ciudad Hidalgo con Ixtepec, así como con Guatemala, abriendo la puerta al Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
Con esta infraestructura, las mercancías pueden ser transportadas de manera rápida y segura hacia los puertos de Salina Cruz y Coatzacoalcos, consolidando a la región como un nodo logístico estratégico para el comercio interoceánico.
El Aeropuerto Internacional de Tapachula completa esta red de conectividad. Con vuelos directos a la Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Tijuana, este aeropuerto asegura una conexión ágil con los principales centros económicos de México. Además, es el punto de llegada para vuelos privados provenientes de Centro y Sudamérica, haciendo de Tapachula una ciudad clave tanto para ejecutivos como para la logística empresarial.
La modernización de la Aduana de Ciudad Hidalgo también merece especial mención. En la última década, sus operaciones se han triplicado, siendo hoy en día la número diez en el país; y su eficiencia proyecta que en este sexenio se convertirá en una de las cinco aduanas más importantes del país. Su papel como puerta de entrada y salida para mercancías entre México y Centroamérica es crucial, y su crecimiento refleja el dinamismo comercial de la región.
Por supuesto, no podemos dejar de mencionar los beneficios fiscales. La región fronteriza sur disfruta de un ISR reducido al 20% y un IVA al 8%, incentivos que hacen que establecerse en la Frontera Sur sea no solo una decisión lógica, sino también rentable.
Estos estímulos, junto con los proyectos de desarrollo en Puerto Chiapas, están transformando el panorama económico de la frontera sur.
La proximidad con Guatemala y el acceso a tratados de libre comercio con todos los países centroamericanos enriquecen aún más el panorama. La Frontera Sur no es únicamente un punto de conexión con Centroamérica; es un puente estratégico hacia mercados dinámicos y llenos de oportunidades. Esta integración comercial brinda a las empresas la posibilidad de establecerse en una región que combina acceso privilegiado a mercados, infraestructura de primer nivel y un entorno fiscal sumamente atractivo.
El momento de invertir en la Frontera Sur es ahora. Esta región no solo ofrece oportunidades, sino que está transformándose en un imán para empresas que buscan maximizar su competitividad en el mercado global. En un mundo que demanda rapidez, eficiencia y cercanía, la Frontera Sur chiapaneca es la respuesta. No se trata solo de aprovechar una tendencia; se trata de ser parte del futuro del comercio global. ¿Estás listo para ser parte de esta transformación?