Comentario Zeta Por Carlos Z. Cadena (28 NOV)

Entre lágrimas y tristeza católicos de Tuxtla Gutiérrez, despiden a su Gran Pastor por 10 años en la Arquidiócesis.

Una postal triste, desconsolada y doliente, donde las lágrimas y sollozos de muchos católicos Tuxtlecos, se hicieron presente como una forma de despedir al arzobispo de la capital chiapaneca, Fabio Martínez Castilla, que este fin de semana partió hacia el cielo, una lamentable noticia que calo hondo en la sociedad capitalina. Mucha gente estaba identificada con el arzobispo, un personaje de la grey católica que se había dado a querer y estimar con muchas familias Tuxtlecas.

Monseñor Fabio Martínez Castilla nació el 20 de julio de 1950 en Isla Mujeres, Quintana Roo; hijo de Domingo Martínez Sabido y María Regla Castilla Sánchez. Es el quinto de seis hermanos; Herlinda, Ignacio, Ismael, Patricio, Fabio y Julián. El 19 de febrero de 2013, SS Benedicto XVI lo nombró II arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, tomando posesión el 18 de abril del mismo año. Celebró 10 años de presencia en la Arquidiócesis de Tuxtla.

En la crónica de Diario de Chiapas, se advierte que fue una noche llena de sentimientos y emociones encontradas fue lo que se vivió en el interior del Seminario diocesano, desde la llegada de Monseñor a la capilla interina para su despedida. Los sacerdotes lo esperaban con la túnica morada, la que utilizan en Semana Santa y que representa la muerte de Cristo en la tierra; así recibieron a Monseñor Fabio Martínez Castilla. Mientras el féretro salía del vehículo que lo transportaba, los padres se veían entre sí, perdiendo la vista a donde yacía el cuerpo de Monseñor; en voz de quien fuera Vicario General de la Arquidiócesis de Tuxtla, José Luis Espinoza Hernández, recibieron al cuerpo para luego hacerle entrada en hombros de seis sacerdotes que trasladaban el féretro al interior de la capilla.

En el atrio, la gente que llegó a acompañar a la familia diocesana veía el paso del féretro mientras algunos más captaban el momento con tristeza en sus miradas. Al llegar a las puertas de la capilla, el féretro fue bajado y puesto en la base en donde fue escoltado hacia dentro del recinto religioso por los jerarcas de la diócesis hasta los pies de la Virgen de Guadalupe, a un lado de la cruz de Cristo, ese fue su lugar en donde presenció su primera misa.

Coronas de flores adornaban las paredes de la capilla, rosas blancas, amarillas, rojas, girasoles y plantas de ornato; le daban alegría al lugar que, sin decir nada, la gente podía sentir un pesar. Monseñor José Luis Mendoza Corzo, obispo auxiliar de Tuxtla Gutiérrez fue el que tomó la voz y llevó a cabo la misa en la que la feligresía católica presente escuchó a cada palabra la despedida que la comunidad diocesana le daba a Monseñor Fabio.

Fue una misa cargada de emociones, se podía ver en los asientos a personas pensativas, una más con lágrimas en los ojos y otras más atentas al sermón que al obispo auxiliar daba con respecto a la vida y la travesía que hacemos a la muerte. Al concluir la Santa Misa, pidieron en orden, a los que quisieran pasar a despedirse de Monseñor Fabio podían hacerlo de forma ordenada; no tardó en organizarse la fila para poder pasar poco a poco. Cada uno de los feligreses que pasaba, daba a cuenta su sentir al verlo yacido con los ojos cerrados. Susurros, algunas lágrimas y admiración, eran algunas expresiones que las personas hacían al ver a Monseñor.

Toda la madrugada, personas se iban y otras llegaban, las visitas no pararon en todo el tiempo que estuvo en el Seminario diocesano. Alrededor de las 09:30 de la mañana comenzaron los preparativos para su traslado hacia la Catedral de San Marcos, en una procesión en la que los seminaristas se despedían de quien muchos de ellos señalaron, “fue nuestro padre espiritual”.

Desde su partida de la capilla, las madres que llegaron a acompañar la procesión, padres y los seminaristas, brindaron el último adiós, con lágrimas en los ojos, pero felices porque, “el padre ha llamado a nuestro pastor a su morada, esperando la venida de la resurrección”.

La partida fue pronta, el féretro fue llevado a una camioneta acondicionada para que el féretro fuera expuesto en la procesión y se despidiera en su andar por el boulevard Ángel Albino Corzo. Los cánticos y alabanzas se escuchaban sin parar acompañando la rodada de la camioneta en la que iba Monseñor, la comitiva era amplia, muchos con banderas blancas y otros con solo la fuerza de sus voces que respondían a cada alabanza.

El camino era largo, pero nadie quería llegar pronto, ya que se acercaba el momento de dejar a Monseñor en donde era su lugar, la Catedral de San Marcos. Muchísimas personas abarrotaron el atrio esperando la llegada de Monseñor Fabio, querían estar cerca de él, querían verle, muchos gritaron su nombre para despedirse, todo esto mientras el féretro entraba a las puertas de catedral.

Ayer a las 12 del día, hora que partió a los hangares del aeropuerto para ser trasladado a Quintana Roo.

OJO: En agravio de mujeres, prisión de seis años por delitos electorales

Quienes cometan delitos electorales en agravio de mujeres que aspiran a cargos de elección popular, incluidos servidores públicos, podría alcanzar una pena privativa de libertad hasta por seis años y multas hasta de 300 días de salario mínimo, por lo que las víctimas de esta conducta ilegal deben denunciarlos para que se proceda en consecuencia.

“La Violencia Política contra las Mujeres en Razón de Género (VPCMRG), constituye un delito electoral, por lo que debe ser denunciado ante la Fiscalía Especializada en materia de Delitos Electorales (FISEL), de la Fiscalía General de la República (FGR)”, puntualizó el titular de la Fiscalía Electoral de la Fiscalía General de la República, José Agustín Ortiz Pinchetti.

El servidor público, destacó que en el proceso electoral 2023-2024 más de 10 mil cargos de elección popular serán para las mujeres, de ahí la importancia que ciudadanos, servidores públicos y candidatos conozcan la ley en la materia, para evitar que por desconocimiento incurran en un delito electoral. Reiteró que de acuerdo con el artículo 20 Bis de la Ley General en Materia de Delitos Electorales -integrado por 14 fracciones-, quienes cometen violencia política contra las mujeres pueden recibir sanciones que van de 50 a 300 días de multa y prisión de uno a seis años.

Finalmente, se expuso que los delitos electorales pueden ser denunciados de manera presencial en la Fiscalía Electoral o mediante sus sistemas de atención ciudadana: FISETEL (800 833 7233) y en la página de internet fisenet.fgr.org.mx.

Ángel Torres, ante Asociaciones Civiles y líderes de colonias.

 En un evento trascendental, Ángel Torres fue destacado como invitado especial en una ceremonia que congregó a más de 1,200 representantes de Asociaciones Civiles y líderes de Colonias de la Capital Chiapaneca, Tuxtla Gutiérrez. Con convicción y el entusiasmo que caracteriza a Ángel Torres, afirmó estar seguro de que, trabajando en unidad, lograrán buenos resultados en favor de Tuxtla y de Chiapas. La ceremonia contó con la participación de líderes de diversas colonias de Tuxtla, quienes reafirmaron su compromiso con Ángel Torres, manifestando su disposición para colaborar estrechamente a su lado desde cualquier posición, contribuyendo así a un Tuxtla y un Chiapas más prósperos. 

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