Señales de grandes derrotas en el Estadio Azul.
Hace unos días, la Comisión de Quejas y Denuncias del INE, ordenó la suspensión de los eventos masivos de Claudia Sheinbaum, virtual candidata presidencial de Morena, ordenándole que las reuniones que hiciera debieran ser en lugares cerrados y sólo para los militantes y simpatizantes de su partido, evitando violaciones graves a la equidad en la próxima contienda electoral.
Sheinbaum y sus asesores, decidieron hacer una concentración masiva en el estadio azul, enclavado en la ciudad de México, la ciudad que recién ella gobernó. Pero el evento masivo resultó ser un gran fracaso, lo cancelaron por la falta de asistencia de los supuestos militantes y simpatizantes.
¿Qué podríamos deducir de este fiasco político?. Primero.- Si el evento era para militantes y simpatizantes de Morena, significa que Morena no se ha logrado consolidar como un partido político al carecer de estructuras y disciplina, no olvidemos que nació como un Movimiento bajo el liderazgo de López Obrador para llevarlo al poder, donde su permanencia depende de su cohesión política que mezcla diferentes intereses de tribus llegadas de todos los partidos políticos y de aquellos que creyeron en la palabra de un hombre que prometió corregir los problemas del país pero que sólo terminó destruyendo lo poco bueno que había.
Segundo.- Evidenció el divisionismo al interior del movimiento marcado por la definición de la candidatura en la ciudad de México, donde Sheinbaum ha preferido impulsar a García Harfuch, un personaje con señalamientos por sus nexos con los principales involucrados en el caso Ayotzinapa, el cártel Guerreros Unidos y el exsecretario de Seguridad Pública Genaro García Luna; haciendo a un lado a los duros del obradorismo, como Clara Brugada. Un síntoma que se podría viralizar hacia las otras ocho gubernaturas por disputarse.
Tercero.- Tal y como lo sostuvimos en un análisis anterior, las encuestas mienten; las encuestas de hoy no están reflejando la realidad de la opinión pública. Las encuestas están siendo utilizadas como estrategias políticas de inducción e inhibición del voto.
Cuarto.- Que los eventos masivos de Morena y su candidata, sólo se llenan con el pago de asistencias y acarreos, un sistema que con el tiempo ha sufrido desgaste y que no es el único ingrediente para asegurar el triunfo.
Quinto.- Parece que Claudia Sheinbaum en realidad, no cuenta con la simpatía de los ciudadanos que recién gobernó. Los múltiples accidentes en el metro, junto a la tragedia mortal de la línea 12, así como su paso por la alcaldía Tlalpan y los permisos otorgados a un colegio que se derrumbó y mató a varios niños, son un lastre que podría estarle cobrando una factura política. Y,
Sexto.- El Presidente de Morena justificó que la nula asistencia fue producto de la falta de organización, de ser esto cierto, entonces Claudia y la continuidad de su movimiento estarían metidos en un grave problema para poder ganar.
Lo mismo que le sucedió a Claudia Sheinbaum en el Estadio Azul, le sucedió hace 12 años al PAN con Josefina Vázquez Mota; fue el preámbulo del descalabro de su campaña. ¿Será el estadio azul un lugar de grandes derrotas como las que ha sufrido el equipo de casa? Claudia iba a jugar de local, Claudia estaba en casa.
