Por: José Luis Gálvez Gómez
Política de austeridad vs prosperidad.
La Política de austeridad republicana en términos económicos, no es más que una política económica basada en la reducción del gasto público y el aumento de los impuestos de cara a conseguir el menor déficit público posible.
Sin embargo, parece que esta idea sólo se trató de una frase publicitaria para atraer el apoyo social, ante el despilfarro de los gobiernos anteriores, tomando como referencia el costoso avión presidencial, que hoy en día nos ha mostrado su verdadera cara.
El avión no se ha vendido, los impuestos sí se incrementaron, principalmente los de la luz eléctrica y los de la canasta básica, se redujo hasta en un 50% el gasto público y los fideicomisos están desapareciendo.
Estas decisiones lejos de haberse reflejado en bienestar social, han traído graves consecuencias para México y menciono 3 que son muy significativas.
Primero.- hubo un gran recorte de recursos que resultó fatal para desincentivar la investigación científica y la anulación de proyectos tecnológicos de años, lo cual nos estará condenando a ser un país rezagado y sin futuro.
Segundo.- Si aumentaron los impuestos y hubieron grandes recortes presupuestales en todas las áreas, tenían que haber suficientes ahorros, que hoy, ante esta grave crisis económica, bien podrían servir para apoyar a los desempleados, con un seguro laboral y a la mayoría de las empresas pequeñas y medianas que son las mayores empleadoras en el país, lo cual tampoco sucedió.
Y Tercero, como el más preocupante.- La reducción de los recursos en materia de salud, ha provocado que no se hayan practicado las pruebas necesarias para detectar a los contagiados de covid y poder aislarlos en su debido momento para evitar su propagación en la población y que, los trabajadores de esas instituciones hayan recibido equipamiento e insumos de muy mala calidad, dando muerte a más de 100 trabajadores en el IMSS, así como a que el país entero esté en números rojos por los más de 13 mil muertos por la pandemia y que aún no termine la curva de contagios por inclinarse rebasando hoy los 110 mil y seguimos contando.
Así pues, la austeridad presupuestal ha provocado una severa parálisis gubernamental, que no proyecta nada hacia el futuro y los mexicanos seguimos sufriendo, porque el hecho de recibir ayudas asistenciales, no está cambiando, ni cambiará absolutamente en nada las condiciones materiales de nadie.
Pienso que es momento de cambiar la estrategia, es momento de reorientar el gasto de manera eficiente y productiva, que nuestros impuestos generen dinamismo económico, que se invierta el dinero en aquello que genera más dinero y así poder sufragar todas las necesidades, ¡ errar es de humanos! , para qué esperar a que hayan más muertos?, para que esperar a que hayan más pobres?, para que esperar a que hayan más desempleados?, estoy seguro que lo que quieren todos los mexicanos, es vivir mejor, que nuestras condiciones mejoren, que nuestras familias salgan adelante y que a México le vaya mejor.
Seguro estoy que todos quieren prosperidad y no austeridad, porque la austeridad es depresiva socialmente y es letal.
En cambio, la prosperidad sí logra darnos felicidad física y espiritual, comiendo suficiente y vistiendo bien, con salud, casa y educación para nuestros hijos, con un futuro prometedor y en un México unido, seguro y en paz.
La verdad es que, sobra decir que la mayoría de los mexicanos siempre han vivido en la austeridad, con un par de zapatos, comiendo arroz, frijol y tortillas, hoy lo único que desean es prosperidad. (iM-rrc)