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Aunque todos los miembros del clan Kardashian-Jenner han sufrido en mayor o menor medida las consecuencias menos agradables de la fama, hasta ahora Kylie Jenner había salido relativamente bien librada en comparación con su hermana mayor Kendall, que ha tenido que lidiar en el pasado con varios acosadores que han logrado colarse incluso en su jardín.
Desgraciadamente, este martes le ha tocado el turno a la empresaria de llevarse el susto de su vida cuando un completo desconocido apareció en el interior de su propiedad en Hidden Hills exigiendo verla. Según la información a la que ha tenido acceso el portal TMZ, el hombre recorrió sin ningún problema el camino de entrada y se puso a golpear de manera violenta la puerta principal.
Lo más perturbador de toda esa situación, en opinión de la joven, es que su mansión se encuentra en una comunidad cerrada a los no-residentes y protegida además por medidas de seguridad extra, pero el intruso consiguió sortearlas sin demasiado problemas. Se cree que consiguió escalar de alguna manera los muros a pesar de que el equipo de guardaespaldas de Kylie se percató de que se encontraba claramente bajo la influencia de algún tipo de droga cuando le escoltaron a la fuerza fuera de los terrenos de la vivienda para que fuera arrestado por las autoridades.
Aunque no se ha confirmado si la estrella y su hija pequeña Stormi se encontraban en casa en ese momento, en los documentos legales que ha presentado su abogado para solicitar una orden de alejamiento, que ya le ha sido concedida, ella insiste en que ese fan obsesivo podría regresar en cualquier momento.
‘Tengo una niña muy pequeña y me da mucho miedo que no esté a salvo’, afirmó, añadiendo además que el hombre sigue sus movimientos y los de toda su familia a través de las redes sociales. (iM-rrc)
