“Como anillo al dedo”
Esta frase que expresó el Presidente de la República en su enésima mañanera hace unos días, provocó muchas expresiones de sentimientos en la sociedad, algunos sorprendió, a otros indignó y seguro hubieron otros más que hasta les gustó o por lo menos les causó cierta gracia por el lenguaje coloquial que utilizó, característica por cierto del mandatario.
Es decir, provocó mucho revuelo popular y dio paso a un sin número de opiniones, con diferentes matices y fuerza dependiendo de quién la haya expresado.
Sin embargo, estoy seguro que muy pocos o casi nadie, incluyéndome, alcanzamos a vislumbrar la pretensión y el origen de tan sorpresivas palabras.
El pasado 21 de abril del 2020, se publicó en la Gaceta Parlamentaria de la Cámara de Diputados, año un paquete de iniciativas del Grupo Parlamentario de Morena y una del propio Presidente, dentro de las cuales destacan 2, que considero son muy preocupantes.
1. Iniciativa con proyecto de decreto por el que se adicionan diversas disposiciones de la ley Federal de presupuesto y responsabilidad hacendaria.
2. Iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma el primer párrafo del artículo 29 y se adiciona un ultimo párrafo al artículo 65 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
La primera, presentada por el ejecutivo, concretamente le traspasa a la Secretaría de Hacienda, las facultades de la Cámara de Diputados, para que establezca las disposiciones para realizar los ajustes a las asignaciones autorizadas de las dependencias federales, en caso de que durante el ejercicio fiscal se presenten emergencias económicas (entiéndase pandemia-caída de los precios del petróleo) y también pueda destinar recursos, para mantener la ejecución de los proyectos (léase Tren Maya, Refinería Dos Bocas y Aeropuerto de Santa Lucía) así como para las acciones prioritarios de la Administración Federal y fomentar la actividad económica, además de atender las emergencias de salud (covid 19) y programas en beneficio de la sociedad (programas populistas electoreros).
Por otro lado y aún más peligroso, es la iniciativa presentada concretamente por la Diputada Lorenia Valles del Distrito 3 de Sonora, por cierto que es Lic. En Administración de Empresas Turísticas, quien propuso modificar el artículo 29 constitucional para que, sólo el Presidente de México pueda suspender los derechos cívicos en lo casos de invasión, perturbación grave de la paz pública o de cualquier otro (pandemia), que ponga a la sociedad en grave peligro, mediante la declaratoria de las Juntas de Coordinación Política de ambas Cámaras del Congreso de la Unión, cuando los miembros de ambas no se puedan reunir por caso de emergencia, derivado de la presencia de una o varias amenazas naturales o antrópicas (entiéndase específicamente una pandemia) a través de un mecanismo transitorio denominado “Pleno de Urgencia y Obvia Resolución”. Se agrega además que las Legislaturas de los Estados podrán utilizar el mismo mecanismo cuando se trate de reformas a la Constitución.
En ambas iniciativas lo único que podemos encontrar es, una extralimitacion o ampliación de las facultades del Presidente de la República, para que utilice los recursos federales de acuerdo a sus fines y objetivos políticos administrativos y pueda suspender las garantías individuales FAST TRACK, tomando como pretexto la pandemia por la que hoy atraviesa el mundo con todas sus consecuencias económicas y el confinamiento social en el que nos han metido.
La pandemia, el problema económico, el desempleo y la crisis en general por la que hoy estamos atravesando mundialmente, no debe servir como pretexto para implantar una DICTADURA en México. Así es y hay que llamarle por su nombre.
El hecho de que los Diputados Federales, Senadores o Gobernadores de los Estados, pertenezcan al mismo partido que el Presidente de México, no debe implicar que abusen de su posición para hacer los caprichos del mismo y otorgarle todo el poder, porque si lo hacen, estarán traicionando la voluntad del pueblo que los eligió porque convencieron y hablaron de hacer una transformación democrática en el país cambiando las malas cosas que habían hecho sus antecesores, aspecto que mas bien va en retroceso ya que en toda nuestra historia sobran ejemplos de dictaduras que han generado muchos problemas a nuestra nación. Los propios diputados estarán destruyendo lo último que queda de la división de poderes y contrapesos políticos en México.
Son cualquier cosa, menos representantes populares toda vez que hoy por hoy, no representan los intereses de la sociedad, representan los intereses de un solo hombre, del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Es hora de quitarse las máscaras, porque si esto sucede, lo que realmente están estableciendo en México con todas sus acciones, es un gobierno populista que devendrá en una Dictadura y entonces no podrán hablar del Gobierno de la República, porque la República habrá muerto.
La oposición en ambas Cámaras, llámese PRI, PAN, Partido Verde, PRD, Movimiento Ciudadano, etc simplemente no existen. Han callado y eso hace pensar que, o les tienen pisada la cola, o son cómplices por dinero, o no les interesa su país y solo les importa llegar a cobrar su dieta, porque es realmente increíble que hasta este momento no se hayan manifestado abiertamente su preocupación por este atropello a la democracia.
Sabemos perfectamente que Morena tiene la mayoría en ambas Cámaras, pero eso no debe justificar ni que unos hagan lo que se les antoja o les interesa, ni que los otros (la oposición) no hagan su papel de defender los intereses del pueblo para mantener la democracia como la mejor forma de vivir en armonía y paz social. Porque si van denunciar estos atropellos después de que ya hayan sido aprobadas dichas iniciativas mejor retírense de sus curules y denle paso a personas que si quieran trabajar por el bien de los mexicanos.
Hoy comprendo las palabras del Presidente, ahora entiendo porqué la pandemia le vino al Gobierno, que no a México, “cómo anillo al dedo”.
