Comentario Zeta Por Carlos Z. Cadena (ENE/27/2020)

Crisis de valores humanos en nuestras Universidades oficiales de Chiapas.

Nunca se había observado una crisis de universidades oficiales en Chiapas como la que se vivió y vive desde el año pasado estas instituciones de educación superior, y no necesariamente dentro de la problemática estudiantil, que sería en lo inmediato que pudiera suceder,  sino en la moral pública de sus Rectores o Superiores quienes de una y otra forma ha sido protagonistas de escándalos financieros y “Estafas maestras”, violación a los contratos de trabajo, manipulación de consejeros universitarios, familiares en nómina,  y lo más grave de escenarios sensuales,  y abusos  sexuales.

 

La UNACH, UNICACH, la UNICH, la UPde Chiapas y hasta la Universidad Tecnológica de la Selva, ha sido protagonistas de postales que exhiben a nuestras universidades oficiales como centros de corrupción y descomposición que no se había observado en otros sexenios, por lo que se requiere  dar jalones de oreja, e inclusive buscar los relevos, porque al menos no han respetado,  mucho menos se han disciplinado a la cuarta trasformación.  

 

Alrededor de muchos Rectores  de nuestras Universidades Chiapanecas, increíblemente se han escritos epopeyas y hazañas totalmente opuestas a la que puede tener en imagen una Universidad oficial de Chiapas. Son hazañas más proclives a la “nota roja”,  que a una página académica, científica,  cultural o de investigación. Hacer un recuento de las historietas o episodios de sus actuaciones en los últimos 12 meses, la educación superior de Chiapas, no le ha ido también que digamos, aunque otros digan lo contarlo.  

 

Ha habido mucho desgaste y daño a la educación universitaria, y hay Rectores que ya no merecen seguir al frente de algunas Universidades oficiales. Sus escándalos han trascendido hasta a nivel nacional, y este año sin temor a equivocarnos volverán al redil el señalamiento público y ser parte principal  de escándalos. Se desinfló la imagen universitaria de Chiapas, como nunca en la historia, porque el problema encierra que no se han puesto la camiseta de la cuarta trasformación, según ellos siguen viviendo en la tercera trasformación. Crisis histórica de valores humanos en muchas figuras de los rectorados. Veremos y diremos.   

 

La frontera sur de México: Una vergüenza nacional.

Caminar entre los límites fronterizos de México y Guatemala, a un lado del sendero del  Rio Suchiate, justamente enfrente de  la entrada más importante y  reconocida oficialmente como es la conexión principal del Puente “Rodolfo Robles”  donde se encuentra el denominado “Puerto fronterizo de Ciudad Hidalgo” , que sería nuestra entrada principal de relaciones exteriores entre nuestra tierra azteca y la tierra del quetzal, es doloroso e hiriente porque muestra que en efecto existen dos Méxicos diferentes: El México del Norte y el México del Sur.

 

Ver de cerca las espesuras de los  matorrales y  malezas, además de esas postales llenas de piedras e inmundicias y basura, con olores pestilentes y putrefactos, muestran una frontera sur mexicana totalmente marginada y olvidada, muy distintas a la frontera norte    entre Estados Unidos y México cuya  longitud de 3169 kilómetros  pasa por cuatro estados estadounidenses, seis estados mexicanos, y tiene más de 20 puntos de travesía importantes de  ciudades mexicanas como Tijuana, Mexicali, Nogales, Reynosa, Matamoros, Ciudad Juárez, entre otras.  

Son fronteras mexicanas del norte del país,  lavadas con grandes extensiones de  planchas de concreto para que los agentes mexicanos y estadounidenses, tengan mejores visibilidades  ópticas, y sobre todo que la modernización de sus miles de videocámaras adaptadas en aparatos sofisticados dentro del rubro digital, hagan un papel importante en supervisoría y vigilancia. Además las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM), todas cada año las  actualizan y renuevan con su manita de gato.  Es otro México pues.  

 

En Chiapas, cuya entidad hace frontera con Guatemala, la principal entrada oficialmente que es el puerto fronterizo de Ciudad Hidalgo, entre México y la franja fronteriza de Centroamérica y hasta delos países de América del Sur, es una frontera con gran dosis de “vergüenza nacional”, porque no se ofende ni Ciudad Hidalgo,  menos Chiapas, sino que se ofende a México. Es vergonzoso y es donde se contradice el centralismo federal, de que haya fronteras mexicanas  distintas, desiguales, diferentes, disparejas,  disímiles y totalmente opuestas que pareciera que la frontera sur estuviera en otro país, que no sea México.

Hasta ahora la frontera sur de México, -no necesariamente este sexenio-  desde sexenios pasados se ha tenido olvidada por parte de la administración pública federal. Resulta contradictorio que una frontera mexicana que colinda con los  países más belicosos del Continente Americano como son las naciones de Centroamérica, se le haya tenido en la más completa marginación,  y porque no decirlo segregada del pacto nacional.

  Es imperdonable lo que le han hecho a la frontera sur, y que –se quiera o no aceptar-  es la puerta de los mexicanos, donde han ingresado las enfermedades y han pasado personajes como los marasalvatruchas, grandes delincuentes y exguerrilleros,  y hasta terroristas de otros países islámicos.  Ojala la Secretaria de Gobernación, la SCT, y la misma Secretaria de Relaciones Exteriores, asuman su papel y trabajen conjuntamente para poner a la vanguardia a la frontera sur de México.

 

No podemos tener dos fronteras mexicanas, dos categorías de mexicanos.  Es necesario partidas especiales del gobierno federal para darle lustro y decoro a esta puerta del sur. Urge modernizar e ir con el cambio del país,  el sur de México. Es mucha la diferencia que hay entre los Méxicos del norte y del sur, ya este tiempo de emparejar el piso nacional en su desarrollo y progreso.

No podemos tener dos Méxicos distintos. La frontera sur es una vergüenza nacional.

 

Fiscalía federal de Chiapas: Le apostemos a los jóvenes:

 

Con el llamado a trabajar en la capacitación de los jóvenes, este fin de semana el Delegado de la Fiscalía General de la República en Chiapas, Alejandro Vila Chávez, participó en el ciclo de conferencias “La etapa de Investigación en el Sistema Penal Acusatorio”.

Durante el encuentro con alumnos de la Maestría en Derecho Penal Acusatorio de la Universidad del Sur, el funcionario federal destacó la importancia de apostarle a las nuevas generaciones: “Ustedes vienen empujando fuerte y hoy más que nunca necesitamos mujeres y hombres comprometidos con la justicia y con la seguridad de los pueblos”, afirmó.

Alejandro Vila reconoció que actualmente Chiapas vive una etapa de paz y tranquilidad como resultado de las estrategias impulsadas por los tres niveles de gobierno, las cuales se analizan a través de la Mesa de Seguridad que cada día encabeza el Gobernador Rutilio Escandón Cadenas.

“Los invito a seguir trabajando en sus sueños, haciendo cada día lo que más les gusta con pasión, pues sólo así vendrán los éxitos”, finalizó diciendo.

 

 

PD: El próximo 12 de febrero se llevara a cabo en la capital del país, la plenaria nacional  del colectivo  femenil 50+1 que dirige la chiapaneca María Elena Orantes.

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