Comentario Zeta Por Carlos Z. Cadena (28/Abril/2020)

Peligroso foco rojo: Bomba de tiempo los migrantes  asentados en Tapachula ante el coronavirus.  

 

 

El Instituto Nacional de Migración (INM), ha creado una bomba de tiempo con el fenómeno de los migrantes que se encuentran asentados en esta parte del sur del país, y sobre todo la ciudad de Tapachula, donde aún hay miles de extranjeros transitando por las  calles de la ciudad creyéndose que son turistas aún, o buscan que la oficinas del INM o COMAR, los atiendan cuando se supone que deberían de estar “cerradas” ante la contingencia que se vive en México con la enfermedad del coronavirus.

 

Ante el escenario de vida o muerte  por el coronavirus que se vive ante esta situación de que desde ayer lunes 27 de abril, y hasta la segunda semana de mayo, el peligro es más riesgoso porque los contagios se encuentran por todos lados, sin que se cumpla lo de la movilidad de la gente y migrantes, los riesgos se multiplican de manera alarmante en Tapachula.   

 

Lo hemos repetido infinidad de veces que el problema migrante en Tapachula con la aparición del covid 19, es más peligrosa que la que pueden vivir otras ciudades del país. En Tapachula,  “el problema es doble”, se vive el problema de la concientización no solamente de los ciudadanos locales  ante el coronavirus, sino la de los miles de extranjeros que deambulan por las calles que se resisten hacerle caso a los llamados de prevención. Es una mezcla de responsabilidades, porque los locales se pudieran cuidar, pero si  no hacen los extranjeros estamos ante una bomba de  tiempo, de  días  que pudiera presentare una calamidad, una desgracia de propagación.  

 

Aparte de que la frontera sur de México, no se “cerro”, (como sí  lo hizo Guatemala), los extranjeros sigue cruzando el frágil paso del   rio Suchiate, sin que el Instituto Nacional de Migración (INM), asuma su responsabilidad, y se encaminan diariamente hacia Tapachula. A eso agréguele los miles que se encuentran diseminados por la ciudad. En el caso de los habitante locales, Tapachula es considerada   una ciudad de proveeduría, abasto,  suministro,  y mercado, donde mucha gente baja de la zona alta o sube la dela zona baja, para satisfacer sus compras y adquisiciones  de insumos para sus hogares.  

 

 

Debemos de saber, que  entramos a una etapa mucho más grave de lo que se ha vivido a finales de Marzo y todo este mes de abril. El grave problema de la  fase de la mitigación, y que no significa que el virus se haya “mitigado”, sino que somos nosotros los que debemos de guardarnos en casa, pero ante esta problemática que hay con nuestros  ciudadanos  locales y lo peligroso de la movilidad de los extranjeros,  que insistimos siguen haciéndola de turistas y otros buscando las oficinas federales  para que les den sus papeles.

 

Quiérase o no, Tapachula, no fue protegida por el gobierno federal ante este fenómeno de cruce de migrantes con un Instituto Nacional de Migración, que no ha servido para nada y eso debe de preocupar a los más de 700 mil habitantes que tiene la ciudad aproximadamente y sumarle los miles de extranjeros asentados en la ciudad. Inclusive ayer en un  boletín oficial del gobierno municipal de Tapachula, que preside la alcaldesa Rosy Urbina, en un párrafo fue contundente lo que se dijo que los extranjeros no están cumpliendo a cabalidad. Este es el párrafo oficial: “A pesar de las recomendaciones, los extranjeros hacen caso omiso y con ello se corre el riesgo de la diseminación del virus Covid-19, situación que preocupa a las autoridades municipales que han intensificado las medidas preventivas”.

 

Hasta ahora solamente Dios sabe porque no ha habido un problema grave de contagio con los extranjeros, que ya se demostró que son agentes para diseminar el virus del covid 19.  El pasado 20 de abril, La Secretaría de Salud del Gobierno de Tamaulipas informó sobre 16 migrantes dieron positivo en el test por COVID-19. De ellos, 14 estaban alojados en el albergue Nazareth, de Nuevo Laredo, donde se contagiaron tras la llegada de otro deportado procedente de Houston, Texas, que desconocía ser portador de la enfermedad.

Según hizo público la Secretaría de Salud Tamaulipeca  en un comunicado, los casos confirmados hasta el momento corresponden a 6 migrantes originarios de Honduras, 1 de Guatemala, 3 de Cuba, 1 de Camerún, uno sin identificarse su nacionalidad y 4 mexicanos.

 

Hace 20  días  denunció la prensa local de Tapachula, que al menos 9 camiones del INM procedente de Tamaulipas y Veracruz, cargado de migrantes llegaron a Tapachula y Talismán para deportar  alrededor de 500 de ellos,  pero que Guatemala no los acepto, porque su frontera estaba cerrada,  y no se podía ingresar, lo que hizo que los agentes de migración de México, soltaran a los extranjeros para que se esparcieran en la calles de la ciudad y en algunos tramos carreteros. La información fue confirmada por diarios nacionales como La Jornada, lo que mostró que nos vinieron a tirar a extranjeros sin saber sí  estaban enfermos de coronavirus.

 

Una irresponsabilidad tan grave hasta de seguridad nacional y jamás se amonestaron o reprendieron ni a los agentes de migración de Tamaulipas y  de Veracruz,  mucho menos a los de Chiapas, que siguen aumentado,  pero denuncias de corrupción.  Un caso que ni siquiera los organismos productivos de Tapachula, les preocupó, pero que hasta ahora no se sabe, que tan peligroso fue que esos 500 extranjeros que iban a ser deportados por esta frontera sur en  época de emergencia nacional, porque sencillamente ya no se supo que paso con ellos,  pero cientos  de ellos siguen en  Tapachula, y  otros tal vez  regresaron  rumbo a los Estados Unidos. Imagine usted 500 extranjeros, que sin saber su estado de salud los dejaron marcharse  irresponsablemente.  

  

 

 

Se fortalecen medidas de prevención con migrantes para evitar contagios.

Ante la aglomeración de personas extranjeras sobre la avenida de acceso a las instalaciones de la Oficina de Regulación de Estancia del Instituto Nacional de Migración y de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana Municipal, autoridades de los tres niveles de gobierno instrumentaron acciones para que los migrantes puedan seguir las recomendaciones de la Jornada Nacional de Sana Distancia.

Cientos de migrantes acuden a diario a las instalaciones migratorias a realizar trámites relacionados con su situación de estancia en el país, lo que provoca aglomeraciones de personas, ante lo cual se realiza la sensibilización y concienciación hacia ellos sobre las medidas que se deben de seguir para cuidar la salud.

A pesar de las recomendaciones, los extranjeros hacen caso omiso y con ello se corre el riesgo de la diseminación del virus Covid-19, situación que preocupa a las autoridades municipales que han intensificado las medidas preventivas.

Personal de Protección Civil, Servicios Públicos, SPyPC, Guardia Nacional y del Inami, participaron en las acciones realizadas por la mañana de este lunes, al presentarse una constante aglomeración de ciudadanos de diversas naciones.

Para las autoridades municipales que preside Rosa Irene Urbina Castañeda, las medidas preventivas son fundamentales para evitar la proliferación del virus que puede afectar también a la población migrante que se encuentra en la ciudad.

Por ello, se realizan los llamados a que los extranjeros también participen en la aplicación de las medidas de sana distancia.

Peligroso foco rojo: Bomba de tiempo los migrantes  asentados en Tapachula ante el coronavirus.  

 

 

El Instituto Nacional de Migración (INM), ha creado una bomba de tiempo con el fenómeno de los migrantes que se encuentran asentados en esta parte del sur del país, y sobre todo la ciudad de Tapachula, donde aún hay miles de extranjeros transitando por las  calles de la ciudad creyéndose que son turistas aún, o buscan que la oficinas del INM o COMAR, los atiendan cuando se supone que deberían de estar “cerradas” ante la contingencia que se vive en México con la enfermedad del coronavirus.

 

Ante el escenario de vida o muerte  por el coronavirus que se vive ante esta situación de que desde ayer lunes 27 de abril, y hasta la segunda semana de mayo, el peligro es más riesgoso porque los contagios se encuentran por todos lados, sin que se cumpla lo de la movilidad de la gente y migrantes, los riesgos se multiplican de manera alarmante en Tapachula.   

 

Lo hemos repetido infinidad de veces que el problema migrante en Tapachula con la aparición del covid 19, es más peligrosa que la que pueden vivir otras ciudades del país. En Tapachula,  “el problema es doble”, se vive el problema de la concientización no solamente de los ciudadanos locales  ante el coronavirus, sino la de los miles de extranjeros que deambulan por las calles que se resisten hacerle caso a los llamados de prevención. Es una mezcla de responsabilidades, porque los locales se pudieran cuidar, pero si  no hacen los extranjeros estamos ante una bomba de  tiempo, de  días  que pudiera presentare una calamidad, una desgracia de propagación.  

 

Aparte de que la frontera sur de México, no se “cerro”, (como sí  lo hizo Guatemala), los extranjeros sigue cruzando el frágil paso del   rio Suchiate, sin que el Instituto Nacional de Migración (INM), asuma su responsabilidad, y se encaminan diariamente hacia Tapachula. A eso agréguele los miles que se encuentran diseminados por la ciudad. En el caso de los habitante locales, Tapachula es considerada   una ciudad de proveeduría, abasto,  suministro,  y mercado, donde mucha gente baja de la zona alta o sube la dela zona baja, para satisfacer sus compras y adquisiciones  de insumos para sus hogares.  

 

 

Debemos de saber, que  entramos a una etapa mucho más grave de lo que se ha vivido a finales de Marzo y todo este mes de abril. El grave problema de la  fase de la mitigación, y que no significa que el virus se haya “mitigado”, sino que somos nosotros los que debemos de guardarnos en casa, pero ante esta problemática que hay con nuestros  ciudadanos  locales y lo peligroso de la movilidad de los extranjeros,  que insistimos siguen haciéndola de turistas y otros buscando las oficinas federales  para que les den sus papeles.

 

Quiérase o no, Tapachula, no fue protegida por el gobierno federal ante este fenómeno de cruce de migrantes con un Instituto Nacional de Migración, que no ha servido para nada y eso debe de preocupar a los más de 700 mil habitantes que tiene la ciudad aproximadamente y sumarle los miles de extranjeros asentados en la ciudad. Inclusive ayer en un  boletín oficial del gobierno municipal de Tapachula, que preside la alcaldesa Rosy Urbina, en un párrafo fue contundente lo que se dijo que los extranjeros no están cumpliendo a cabalidad. Este es el párrafo oficial: “A pesar de las recomendaciones, los extranjeros hacen caso omiso y con ello se corre el riesgo de la diseminación del virus Covid-19, situación que preocupa a las autoridades municipales que han intensificado las medidas preventivas”.

 

Hasta ahora solamente Dios sabe porque no ha habido un problema grave de contagio con los extranjeros, que ya se demostró que son agentes para diseminar el virus del covid 19.  El pasado 20 de abril, La Secretaría de Salud del Gobierno de Tamaulipas informó sobre 16 migrantes dieron positivo en el test por COVID-19. De ellos, 14 estaban alojados en el albergue Nazareth, de Nuevo Laredo, donde se contagiaron tras la llegada de otro deportado procedente de Houston, Texas, que desconocía ser portador de la enfermedad.

Según hizo público la Secretaría de Salud Tamaulipeca  en un comunicado, los casos confirmados hasta el momento corresponden a 6 migrantes originarios de Honduras, 1 de Guatemala, 3 de Cuba, 1 de Camerún, uno sin identificarse su nacionalidad y 4 mexicanos.

 

Hace 20  días  denunció la prensa local de Tapachula, que al menos 9 camiones del INM procedente de Tamaulipas y Veracruz, cargado de migrantes llegaron a Tapachula y Talismán para deportar  alrededor de 500 de ellos,  pero que Guatemala no los acepto, porque su frontera estaba cerrada,  y no se podía ingresar, lo que hizo que los agentes de migración de México, soltaran a los extranjeros para que se esparcieran en la calles de la ciudad y en algunos tramos carreteros. La información fue confirmada por diarios nacionales como La Jornada, lo que mostró que nos vinieron a tirar a extranjeros sin saber sí  estaban enfermos de coronavirus.

 

Una irresponsabilidad tan grave hasta de seguridad nacional y jamás se amonestaron o reprendieron ni a los agentes de migración de Tamaulipas y  de Veracruz,  mucho menos a los de Chiapas, que siguen aumentado,  pero denuncias de corrupción.  Un caso que ni siquiera los organismos productivos de Tapachula, les preocupó, pero que hasta ahora no se sabe, que tan peligroso fue que esos 500 extranjeros que iban a ser deportados por esta frontera sur en  época de emergencia nacional, porque sencillamente ya no se supo que paso con ellos,  pero cientos  de ellos siguen en  Tapachula, y  otros tal vez  regresaron  rumbo a los Estados Unidos. Imagine usted 500 extranjeros, que sin saber su estado de salud los dejaron marcharse  irresponsablemente.  

  

 

 

Se fortalecen medidas de prevención con migrantes para evitar contagios.

Ante la aglomeración de personas extranjeras sobre la avenida de acceso a las instalaciones de la Oficina de Regulación de Estancia del Instituto Nacional de Migración y de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana Municipal, autoridades de los tres niveles de gobierno instrumentaron acciones para que los migrantes puedan seguir las recomendaciones de la Jornada Nacional de Sana Distancia.

Cientos de migrantes acuden a diario a las instalaciones migratorias a realizar trámites relacionados con su situación de estancia en el país, lo que provoca aglomeraciones de personas, ante lo cual se realiza la sensibilización y concienciación hacia ellos sobre las medidas que se deben de seguir para cuidar la salud.

A pesar de las recomendaciones, los extranjeros hacen caso omiso y con ello se corre el riesgo de la diseminación del virus Covid-19, situación que preocupa a las autoridades municipales que han intensificado las medidas preventivas.

Personal de Protección Civil, Servicios Públicos, SPyPC, Guardia Nacional y del Inami, participaron en las acciones realizadas por la mañana de este lunes, al presentarse una constante aglomeración de ciudadanos de diversas naciones.

Para las autoridades municipales que preside Rosa Irene Urbina Castañeda, las medidas preventivas son fundamentales para evitar la proliferación del virus que puede afectar también a la población migrante que se encuentra en la ciudad.

Por ello, se realizan los llamados a que los extranjeros también participen en la aplicación de las medidas de sana distancia. 

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