El Mundo
SEP. 01 (interMEDIOS).– Pese a que al inicio de cada verano nos proponemos no romper demasiado nuestras rutinas, lo cierto es que siempre acabamos cometiendo algunos excesos. La mayoría de ellos relacionados con la dieta. No hay que sentirse culpable por ello, pero una vez llega septiembre y terminan las vacaciones, toca volver a empezar y recuperar los hábitos saludables. En este sentido, tras la época estival resulta fundamental equilibrar nuestra alimentación.
- Planifica el menú semanal
Una de las formas más efectivas para retomar una alimentación equilibrada después del verano es organizar un menú semanal y basarte en él para realizar la compra. Debe ser variado y que incluya recetas ricas y, sobre todo al principio, fáciles de hacer.
- Rutina adecuada de sueño te ayudará a comer mejor
En las vacaciones de verano solemos acostarnos y levantarnos tarde y es importante que recuperemos rápidamente una rutina de sueño adecuada. En caso contrario, nos costará más organizarnos a lo largo del día. Asimismo, no dormir bien provoca anormalidades fisiológicas que pueden aumentar el apetito y la ingesta calórica.
- Establece los horarios de las comidas para equilibrar tu alimentación
Relacionado con los dos consejos anteriores, es importante que nos marquemos unos horarios para comer si queremos volver a equilibrar nuestra alimentación tras el verano. Eso sí, deben ser realistas. No se puede pretender desayunar a las 6 de la mañana porque tenga muchas ganas de empezar a hacerlo bien si habitualmente no eres capaz de escuchar al despertador hasta las 7.
- Las frutas y las verduras son clave para recuperar una dieta saludable después del verano
Al ser alimentos de origen vegetal, las frutas y las verduras poseen menos grasas y son más nutritivas. Por ello, deben ser clave en el intento de recuperar una alimentación saludable después del verano.
- Beber mucha agua, una clave fundamental para equilibrar la alimentación tras el verano
El agua ayuda a limpiar nuestro organismo por dentro, eliminando toxinas y deshechos, y a evitar todos los problemas que trae consigo la deshidratación, como el dolor de cabeza o la fatiga. Por eso, si quieres equilibrar la alimentación tras el verano, debes beber, al menos, litro y medio al día. Deja los refrescos azucarados y el alcohol y vuelve a hidratarte con agua.
(iM-rcc).
