Redacción
Tapachula, Chis; MAY. 03 (interMEDIOS).– En un tuc-tuc o mototaxi, Rosy Urbina llegó al centro del poblado Felipe Carrillo Puerto, en el municipio de Tapachula. Ahí, con la mano izquierda sobre el corazón, selló un pacto: “No les voy a fallar. Seré la voz de la frontera sur”.
El sonido característico de los mototaxis, conocidos localmente como tuc tucs, anunciaba su llegada, mientras la comunidad se desbordaba en aplausos al verla descender del vehículo. Con la alegría de una banda de guerra, vivas y cálidos abrazos, Rosy Urbina arribó a ese poblado de la zona alta.
“Este ejido te quiere, te ama. En nombre de la comunidad, que seas bienvenida”, expresó una voz emocionada que reflejaba el sentir de los habitantes, transmitiendo el calor humano y el cariño que le tienen a Rosy.
Visiblemente emocionada y con una sonrisa que reflejaba su gratitud, Rosy Urbina respondió: “Me siento contenta de ver caras conocidas. En cada ocasión me han dado siempre una gran bienvenida”. Su conexión con el lugar era palpable, y su discurso resonó con sinceridad y compromiso.
Eduardo Rubiera Urbina, líder de los jóvenes “Jaguares de Oro”, también estuvo presente, apoyando a Rosy en su campaña. “Hoy vengo a pedirles su apoyo, un voto de confianza”, afirmó la aspirante a legisladora.
“He sido la primera mujer en ser presidenta de Tapachula. Ahora”, dijo, “vamos a pasar a la historia por ser la primera mujer en el distrito XII. Vamos a trabajar con honestidad y amor como lo hemos hecho en Tapachula”.
Su arribo fue acompañado por conductores de estos vehículos que circulan en muchas partes del mundo y, ante transportistas, productores de café, hombres y mujeres de campo, Rosy Urbina pidió el apoyo para llegar al Congreso como diputada federal del Distrito XII.
El encuentro también sirvió para abordar temas críticos, como la situación de los productores de café en la región. “El precio del café está muy bajo y ustedes, que son los que trabajan la tierra, son los que menos ganan. Debemos darle un valor agregado”, explicó, destacando la necesidad de mejorar las condiciones económicas de los agricultores locales.
En un gesto de inclusión y reconocimiento, Rosy envió un cálido saludo a los albañiles presentes, antes de hacer un llamado crucial: “Pido votos 6de6 este 2 de junio”, solicitando un apoyo total en las urnas para continuar con su labor transformadora en la región.
El evento reflejó la esperanza y el entusiasmo de una comunidad que ve en Rosy Urbina no solo a una política, sino a una verdadera representante de sus intereses y sueños. (iM-rrc).