©Rafael Victorio Ruiz
Voltean al sur
Al gobierno federal parece que le ha caído el veinte sobre la necesidad de voltear los ojos a la frontera sur y cuidar que sus actividades productivas no se vean afectadas por el ingreso de plagas y enfermedades que podrían ser fatales. El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, ha anunciado nuevos mecanismos para regular el ingreso de ganado de Centroamérica a territorio nacional, situación que ahora es incontrolable y se calculan que pasa un promedio de un millón de cabezas anuales, las mismas que nuestro país exporta a los Estados Unidos.
En este mismo espacio hemos tratado el tema en diversas ocasiones porque no se trata solamente de vacas sino también de otros productos agrícolas, desde plantas hasta frutas y hortalizas, de las que se desconoce su sanidad e incluso procedencia. Café, cacao, mangostán y rambután, solo por mencionar algunos casos, cruzan por el río Suchiate sin restricción alguna. En la región la única vigilancia fito y zoosanitaria que existe en la frontera es en los puentes internacionales.
Por ello, llama la atención que la Sader esté buscando establecer con el gobierno de Guatemala un mecanismo “transparente y eficiente” para la introducción de ganado bovino “sano y que cumpla con la calidad genética que demanda el mercado nacional e internacional”, ello para evitar el trasiego que se está dando a través de la frontera sur. Pretenden instalar tres puntos de ingreso, aunque no han establecido los lugares para ello.
Actualmente en la frontera entre México y Guatemala solamente existen ocho pasos formales, pero con presencia de autoridad únicamente cuatro –Suchiate I y II, Talismán, Ciudad Cuauhtémoc y El Ceibo-, pero hay cientos de cruces irregulares que no ha podido controlar ninguna administración. Pasa de todo, aunque lo que más se atiende es el caso de las personas, los migrantes que se han convertido en un serio problema social en la frontera sur en donde miles permanecen varados sin poder continuar su camino.
El contrabando es un rico filón para las autoridades de todos los niveles y no dudamos que en el caso del cruce ilegal de ganado así sea, aunque se ha descubierto que esa actividad se realiza con mayor intensidad en el norte de Chiapas, en la zona selvática, en donde los medios de comunicación no están en forma permanente y el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) lo permite y con ello pone en riesgo al sector nacional.
El titular de la Sader señala que lograr un control en cuando al ganado que ingresa actualmente de contrabando permitiría “regularizar el mercado y mantener el hato ganadero de nuestro país en las calidades sanitarias y genéticas adecuadas”, pero al permitir esa actividad se corren altos riesgos. No se puede olvidar que la Senasica ha dejado de hacer su trabajo de verificación y en el Puerto de Manzanillo, Colima, desde hace ya varios meses le surgió un brote de Mosca del Mediterráneo que hasta ahora no ha podido controlar en su totalidad.
En el caso del ganado podrían llegar plagas y enfermedades graves que podrían afectar no solamente a ese sector sino a los consumidores finales. Actualmente en México la actividad pecuaria se ha consolidado como la segunda de mayor valor de exportación del sector agroalimentario, al enviar productos cárnicos a 58 países y bovino en pie a Estados Unidos, en una cantidad similar a la que ingresa al país de contrabando. Es decir, el territorio nacional solamente podría estar siendo utilizado de “puente” para los contrabandistas, pero los animales tienen que “nacionalizarse”.
Hace algunos días la Secretaría de Hacienda de México y el Ministerio de Finanzas de Guatemala, firmaron un convenio de coordinación en materia aduanera con la finalidad de fortalecer los controles en cuanto a las exportaciones e importaciones, pero ha quedado demostrado que el contrabando es muy grande y ninguna autoridad lo controla. Es más, en la frontera sur se habla que existen redes dedicadas al robo de tráilers de mercancías que luego son pasadas por el río Suchiate y en cuyas actividades generalmente se involucran a autoridades de todos los niveles.
Resulta importante que el tema del contrabando de ganado se esté tratando al más alto nivel del gobierno federal e incluso, sea el propio titular del ramo quien lo saque a la luz pública y no se esconda esa realidad, lo que ahora falta es que se apliquen las leyes y realmente exista un control de la frontera sur, no solamente en el caso de los migrantes sino de todas las actividades ilegales.
A escena
A unos días de que en la Cámara de Diputados se defina el Presupuesto de Egresos de la Federación del 2020, organizaciones productivas y campesinas de todo el país, presionan para que se otorgue presupuesto suficiente al sector agrícola, ganadero y pesquero, ante los recortes que han sido de alto impacto y para el próximo año podrían ser mayores y por ello advierten que no se podrán cumplir con las proyecciones en cuanto a la autosuficiencia alimentaria que tanto se pregona desde el gobierno federal… Por cierto, la Asociación Nacional de Alcaldes logró que les autorizaran una bolsa de 32 mil millones de pesos mediante el Fondo de Participaciones Federales y el Programa de Fortalecimiento para la Seguridad… Por cierto en los municipios fronterizos chiapanecos en los últimos días se han registrado hechos graves de violencia, en los que presuntamente se encuentran involucrados integrantes de las pandillas trasnacionales conocidas como Marasalvatruchas y por ello el sector productivo y comercial han pedido a las autoridades intensificar los operativos de prevención, sobre todo en los próximos días que se celebrará el programa Buen Fin, cuando se incrementan en gran medida las actividades económicas… Hasta la próxima.
(iM-rrc)