©Carlos Z. Cadena
Campaña autoritaria con la “quitadera de placas” en Tuxtla Gutiérrez
No hay parangón en lo que se vive en Tuxtla Gutiérrez, con la ineficacia de los servicios públicos, el desinterés y apatía de las autoridades locales, hasta para ir a solidarizarse cuando se dan las desdichas pluviales con los aguaceros que han inundado en esta época las calles tuxtlecas , y lo grave, la exacción, el requerimiento y el abuso que se viene dando con los grupos ciudadanos para poderlos exprimir con impuestos y alcabalas para hacer crecer la hacienda municipal, y en un escenario que está rebasando el enojo de los ciudadanos, es la campaña autoritaria e imperiosa con la “quitadera de placas” para que usted amable lector vaya a pagar su tributo para que Carlos Morales Vázquez tenga más dinero en su haber.
Como nunca en la historia de Tuxtla Gutiérrez, grupos de agentes viales persiguen y están al acecho para que aquellos vehículos que por una razón quedan mal estacionados, o están fuera del contexto sobre una calle, inmediatamente salen de sus escondites los agentes de tránsito locales para desvalijarlos de sus placas y multarlos después.
Todo pudiera estar en la legalidad, sin embargo, es notorio la desesperación por conseguir multas de parte de los agentes viales, quienes ellos mismos aseguran que le han instruido que lleven placas de vehículos infraccionados, porque urge que haya presupuesto municipal para atender los asuntos locales, y para ello el bueno, resulta ser el flamante secretario municipal, Francisco Zorrilla Ravelo, a quien señalan de ser “El portavoz para el colectivo de agentes de tránsito municipal” para buscar las multas y sanciones de todos los días.
Si usted no se ha dado cuenta, recuerde que un mundo lo vigila para caerle encima y argumentar que por una u otra razón usted violo la ley, por lo tanto, tendrá que ir a pagar su multa y antes cerciórese que no le vayan aplicar otros correctivos que hacen que su pena económica suba.
Nunca se había observado tanta legalidad, rectitud y cumplimiento, y los dicen los mismos agentes de vialidad, “Es que le surge tener dinero, porque hasta nos dicen que nos van a correr por falta de presupuestos. Ahora no solamente hay que cuidarse de los malandracos, sino de los agentes de vialidad que están al acecho de todo lo que usted asuma responsablemente con su vehículo.
Es una asechanza histórica en contra de la ciudadanía, la que lleva a cabo los agentes de tránsito en Tuxtla Gutiérrez, mientras todo eso sucede “El enrejado” Carlos Morales Vázquez, sigue sosegado y sereno en su Castillo Medieval. No le gusta salir y menos si llueve. En fin.
Javier Castellanos, el pionero en trasplantes, debe de ser Medalla “Belisario Domínguez”
La Medalla Belisario Domínguez del Senado de la República es la Máxima Condecoración que el Senado de México otorga a los ciudadanos más eminentes. El nombre de esta distinción honra la memoria de Belisario Domínguez, senador por el estado de Chiapas que fue férreo opositor a la usurpación de Victoriano Huerta a la Presidencia de la República y, por sus abiertas críticas en la tribuna del Senado, fue asesinado el 7 de octubre de 1913. La medalla es conferida anualmente cada 7 de octubre por acuerdo del Senado y entregada por el Presidente de la República o por su representante en el Salón de Plenos del Senado de la República.
Su labor humana en el fondo fue darles vida a muchos otros seres humanos. El empuje del médico chiapaneco Javier Castellanos Coutiño, tuvo como resultado en el gobierno de Ernesto Zedillo la reforma para incorporar a la ley el concepto de “Muerte cerebral” en apoyo de la donación de órganos, pues autorizaba desconectar al paciente limitando la cesión de sus órganos a sus familiares. Castellanos Coutiño ha ocupado la presidencia de la Sociedad Panamericana de Trasplantes y la Sociedad Mexicana de Estudios Oncológicos; asimismo ha sido miembro titular de la Academia de Diurética y Cirugía, mientras que en Roma recibió el reconocimiento de la Sociedad Internacional de Trasplantes y la Medalla del Milenio.
Como miles de mexicanos que han gozado de su ciencia, de su vocación para ayudar a los demás, de sus habilidades en el quirófano y del empuje sin parangón que ha dado a la donación y al trasplante de órganos. Es una eminencia reconocida en todo el mundo (en 2000, en Roma la International Transplant Society le entregó la “Medalla del Milenio” y lo reconoció como “Pionero de Trasplantes en el Mundo”). Castellanos, realizó el 25 de febrero de 1975, hace 44 años, el primer trasplante de riñón en México. Es el pionero y en el mundo es reconocido como uno de los grandes especialistas en materia de trasplantes. Castellanos ha sido profeta en su tierra, pero tuvo que vencer obstáculos, pero como subsecretario de Salud encontró en Juan Ramón de la Fuente el apoyo para crear el Consejo Nacional de Trasplantes. (Sic) (Impacto, El Universal y Diario de Chiapas).
Las gestiones de Castellanos, obtuvieron también que todos los mexicanos en edad adulta, es decir, mayores de 18 años, sean considerados “donadores”, a menos que manifiesten lo contrario. Su labor humana de Castellanos, en el fondo fue darles vida a muchos otros seres humanos. Que mejor que un ciudadano eminente como Javier Castellanos Coutiño, para la medalla “Belisario Domínguez”.
La criminalidad aumenta en el municipio de Suchiate y Mazatán
En la frontera sur de México, el espectro de la inseguridad pública aumenta y se amplifica. Casos como el municipio de Suchiate, que viene dejando precedentes de ser un pueblo sin ley. Increíblemente desde que asumió el cargo la alcaldesa Sonia Eloína Hernández López, la postal insegura de Suchiate se intensificó y recrudeció con homicidios, asaltos a comercios, asaltos a transeúntes y casas habitación, lo que la prensa local la ha bautizado como “La Tijuanita del Sur”.
Evidentemente que esta sospechosa postal de inseguridad pública, ha originado que los habitantes del municipio salgan a protestar ante la difícil situación que tienen con pelos de punta a los miles de Suchiatenses, donde aseguran que hay delincuencia organizada por el gran contrabando de productos y armas que presuntamente existe en esta puerta del país, y ya no se diga los estupefacientes.
Cuando todo mundo advertía que las cosas le irían bien al municipio mexicano que lo divide el Rio Suchiate con Guatemala, resultó ser todo lo contrario con esta fémina que merece ser investigada por la policía federal y la misma Guardia Nacional.
Tan es grave la situación de seguridad pública en esta frontera mexicana del sur, que Mazatán, siendo otro municipio, con índices de catolicísimo más que cualquier otro en Chiapas, y su contorno uno de los más tranquilos de la Costa, en razón de su número de habitantes, vive su peor pesadilla, al convertirse en este trienio en uno de los municipios más calientes donde también la criminalidad se ha acentuado, y que tiene a los mazatecos con “El Jesús en la boca”.
Curiosamente desde que llegó el edil Gilberto Barrientos Coyotzi, al gobierno local, el ambiente se tornó peligroso y los asaltos y robos se encuentran a todo lo que da. Un alcalde famoso por ser “sobandero” y que alivió y curó a muchos mazatecos, lo que creo, simpatías hacia él, y que ahora se lamentan los mazatecos, que no digieren aún, porque este crecimiento de inseguridad en la tierra del cochito y la iguana.
(iM-rrc)